Los protectores solares son nuestros grandes aliados para cuidar la piel de los daños causados por el sol, como quemaduras, envejecimiento prematuro y cáncer de piel. Sin embargo, algunas personas pueden experimentar reacciones alérgicas causadas por ciertos ingredientes de estos productos.

¿Qué son los filtros solares?

Los protectores solares contienen los llamados filtros solares, que bloquean o absorben la radiación ultravioleta (UVA, UVB) del sol para evitar que dañe nuestra piel. Además contienen otras sustancias que les dan buen olor, textura y permiten su conservación. Existen dos tipos principales de filtros solares:

  • Filtros orgánicos o químicos: Absorben la luz ultra violeta y la transforman en calor. Incluyen compuestos como: oxybenzone (benzofenona-3), avobenzona, octinoxato, octocrylene, homosalato, entre otros. Se asocian con mayor frecuencia a reacciones alérgicas de contacto y fotoalergias.
  • Filtros inorgánicos o físicos: Reflejan y dispersan la luz ultravioleta. Los más usados son el dióxido de titanio y el óxido de zinc.

¿Por qué pueden causar alergias?

Algunos filtros químicos pueden provocar una reacción alérgica en la piel, especialmente en personas sensibles o con antecedentes de alergias cutáneas. Esta reacción se llama dermatitis alérgica de contacto y puede aparecer como enrojecimiento, picazón, inflamación o ampollas en las zonas donde se aplicó el protector solar.

Además, algunos filtros químicos pueden causar reacciones solo cuando la piel está expuesta al sol al mismo tiempo, llamadas dermatitis alérgica fotoinducida o fotodermatitis. Es una reacción alérgica que requiere la exposición a un alérgeno y a la luz ultravioleta simultáneamente.

En ocasiones los responsables de las reacciones alérgicas son otras sustancias que forma parte de la composición del protector solar, como perfumes y conservantes entre otros.

Diagnóstico

Identificar el alergenos responsable de la alergia es fundamental para poder evitarlo en el futuro. Para detectarlo, el especialista en alergia puede realizar pruebas epicutánea (patch test) y fotoparche. Estas pruebas consisten en la aplicación de unos parches en la espalda que contienen cantidades estandarizadas de alérgenos sospechosos.

¿Qué hacer si sospechas una alergia al protector solar?

Desde ALERGIADEXEUS te recomendamos seguir estos consejos:

  • Si notas irritación, enrojecimiento o picazón después de usar un protector solar, consulta a un alergólogo
  • El especialista en alergia puede realizar pruebas epicutánea (patch test) y fotoparche, para identificar qué ingrediente está causando la alergia y poder evitarlo en futuros productos.
  • Es importante no dejar de protegerse del sol, ya que los beneficios superan los riesgos, pero siempre con productos adecuados para tu piel.
  • Haz una prueba previa: Antes de aplicar un nuevo protector solar en grandes áreas del cuerpo, pruébalo unos días antes en una pequeña zona de piel (como la cara interna del antebrazo) y observa si se produce alguna reacción.
  • Lee siempre las etiquetas: Evita productos que contengan los ingredientes a los que ya sabes que eres alérgico/a. Si no estás seguro, consulta con tu alergólogo/a.