INDUCCIÓN DE TOLERANCIA ORAL CON HUEVO ELABORADO

A.Claver, B. Navarro, MT. Garriga, E. Botey, S. Nevot, A. Cisteró-Bahíma USP Institut Universitari Dexeus.
Servicio de Alergia. UAB. Barcelona

INTRODUCCION: 

Las elevadas temperaturas y la mezcla con otros alimentos parecen disminuir la alergenicidad de las proteínas del huevo, facilitando su introducción en pacientes alérgicos.

OBJETIVOS:

Ofrecer una alternativa terapeútica en niños diagnosticados de APHu, mediante la introducción de alimentos de uso rutinario: HUEVO ELABORADO (HE)

MATERIAL-MÉTODOS:

Durante 2010, 16 pacientes: 12 varones, 4 mujeres. Edad media 6,3 años (rango: 2-16 ) fueron sometidos a prueba de tolerancia oral (PTO) con HE (alimentos cocinados con huevo a elevadas temperaturas: galletas, bollería, rebozados) Diez referían historia de reacción inmediata (5 anafilaxia, 2 vómitos y 3 urticaria/angioedema) y 6 eran pacientes sensibilizados que seguían dieta estricta. Todos presentaban pruebas cutáneas positivas frente a huevo y fracciones . IgE específica media a clara 28,55 KU/L (rango 1,37-100) y a ovomucoide 20,15 KU/L (rango 1,36-100) PTO inicial: dosis progresivamente crecientes de galletas, bizcocho (receta estándar) y carne rebozada. Posteriormente, continuaron la toma en domicilio de galletas/bollería a diario y rebozados 2-3 veces/semana.

RESULTADOS:

Todos toleraron galletas en la PTO inicial (2-4 u) y 13 bizcocho y/o rebozado. 3 pacientes presentaron síntomas de anafilaxia leve tras la toma de bizcocho, recomendándose ingesta diaria de galletas en domicilio y tolerando, sin incidencias, carne rebozada 15 días después y bizcocho 1 mes más tarde. 7 de ellos refirieron síntomas leves en domicilio (dolor abdominal)
A los 6 meses del inicio, 6 pacientes toleran huevo cocido y 10 yema cocida y los 16 han normalizado considerablemente su dieta y rutina diaria sin haber presentado reacciones importantes. El control analítico realizado a 7 de ellos, muestra clara disminución de las cifras de IgE específica (50% valor inicial)

CONCLUSIONES:

Nuestros resultados muestran como la introducción de HE, incluso en casos persistentes o de peor pronóstico, podría normalizar la rutina diaria de los pacientes y disminuir el riesgo de reacciones graves.